jueves, 4 de septiembre de 2008

Rojo detenido



Semáforo en rojo para ambos.
Manuel por un lado, que siempre se molesta por quedarse estancado en los semáforos, o en cualquier parte, pero esta vez lo tomó de sorpresa, rojo y no pudo no detenerse.
Ella, que podía portar cualquier nombre, caminaba con la mente perdida en ilusiones con las que jugaba unas cuadras y después dejaba tiradas en alguna plaza de paso. Rojo, en inevitable espera para cruzar la calle.
Manuel, inquieto, miró a su izquierda, ella miraba sus pies. Fue un flechazo. Se quedó mirándola pasear unas piedritas con la punta del zapato.
Tenía los ojos definidos, oscuros, con las pestañas en una curva perfecta, los labios rosados y el vestido violeta con flores -recuerdos que Manuel dejó mas tarde marcados en un cuaderno-
Ella no lo miró ni una vez, en cambio miraba sus pies, en una buscó algo en su bolso, miraba el semáforo, miraba de nuevo sus pies.
VERDE. Paso libre, y ella que se pierde entre la masa de peatones acelerados por llegar a la otra esquina.
Bocinazos por parte de los conductores detrás de él, también acelerados, lo hacen volver al mundo.
VERDE. Paso libre para seguir con su ruta, para llegar a casa sin mirar ni de reojo el asiento vacío a su lado.

[...]
Esta muchacha no sera para mí -pensaba mientras la veia doblar para siempre la esquina.
Es que cada mujer que pasa frente a uno sin detenerse es una historia de amor que no se concretará nunca. Y ya se sabe que los hombres de corazon sueñan con vivir todas las vidas.
La conspiración de las mujeres hermosas - Alejandro Dolina
[...]

7 comentarios:

Floretta dijo...

me encata dolina, tiene un no sé.
me gusta sentarme y leer alguno de sus libros alguna que otra vez.

de la canción de fito puedo decir que megusta que ella cuente margaritas del mantel, yo a veces hago ese tipo de cosas.

y del texto... es tan típico, quien no se quedó colgada/o mirando a alguien en alguna esquina.
yo lo suelo hacer, no solo por ver belleza, sino por ver detalles insólitos.

beso :)

¡Mondoke! dijo...

Perfecto!
Me fascinó. Y con ese estilo tan dulce... tan posible... tan utópico...
Fascinante.
Agradézcole por tan lindo relato.

Le Petit Prince dijo...

Este Dolina siempre me deja boquiabierto, agh, que precioso texto, no lo conocia. Gracias.

Esa cancion de FP tiene algo que no muchas canciones, al menos en mi vida, tienen.

Unknown dijo...

Instantes en que las vidas se cruzan sin si quiera ser concientes de ello. Instantes que nadie comprende, nadie sabe "qué hubiera sucedido si...?". Por eso son instantes, efervescentes, efímeros, lejanos pero bien cerquita para dejar un aroma inagotable en nuestro ser. Instantes que hacen valer la pena días de rutina incesantes, dejando a los ojos escaparse para contemplar(se) en la mirada más hermosa.

Me gustó mucho Celes, gracias por compartir :) Un abrazo grande desde mi desaparición!

Unknown dijo...

este post me hizo acordar a muchas trasnochadas en el Tortoni hace mucho tiempo. De estar en el secundario, juntar un par de pesos para pagar el cafe en el tortoni. Sentarnos cerca de la puerta que lleva al sotano, pasar por la puerta angostita y esas escaleras empinadas. Que maravilla, llegar tardisimo a casa, dormir un par de horas y de nuevo arrancar el día.

huellas compartidas dijo...

Justito el Sr. Dolina dejo una historia por mis lados...
Y habrá que saber cuando detenerse no ?... quien dice...
Bello espacio... pasaré de vez en vez...
Que estes bien...
Saluditos

virginia dijo...

yo no se si Dolina es bueno o no (seguro que sí) pero lo que hoy me trae es la canción.. y la magia con tu texto.. me hizo un stand-by provisorio en el alma, para permitirme cruzar en amarillo..

que lindo celes! que lindo..

un besito de repuesto :)